Estamos en pleno verano y los planes para pasar el día en la playa son habituales. Las ganas de bañarse y disfrutar del aire libre nos animan a pasar un día completo en la playa, así que debemos preparar todo lo necesario. Y una de las cosas más importantes es llevar la nevera de playa repleta de comidas ligeras y frutas, además de mucha bebida para evitar la deshidratación. Por eso vamos a dar algunos consejos para llevar comida a la playa.
Pero, ¿qué debemos tener en cuenta a la hora de llevarnos comida a la playa y que se conserve en buen estado? Hoy en Jamón Puro Bellota, tienda de jamón ibérico y de bellota online, te damos algunos consejos para llevar comida a la playa. Durante el verano es más importante que nunca extremar las precauciones, ya que las altas temperaturas favorecen la proliferación de bacterias.
Llevar una buena nevera y unos envases adecuados
Es recomendable llevar a la playa una nevera de buena calidad que garantice la conservación del frío y la higiene de todos los alimentos que nos llevemos a la playa. Recuerda lavarla y secarla muy bien antes de introducir los alimentos para garantizar la higiene.
Para conservar el frío también es importante utilizar bloques compactos de hielo o bolsas de gel para mantener fríos los alimentos, así que nada de llenar la nevera con cubitos de hielo. Poco a poco se irán derritiendo y convirtiéndose en líquido, perdiendo por completo el frío.
Pero además de llevar una neverita adecuada, hay que elegir unos envases adecuados para la comida con cierre hermético. Te ayudarán a que se conserven mejor, pero también a evitar que si un alimento está contaminado, pueda afectar al resto.
Prestar especial atención a la temperatura de los alimentos
Pasar un día de playa es estupendo, pero debemos llevar mucho cuidado si no queremos que se convierta en el punto de partida de un problema gastrointestinal. Es muy importante conservar muy bien los alimentos y no romper la cadena del frío.
Si has preparado un plato de comida caliente en casa, debes esperar a que se enfríe antes de meterlo en la nevera. Los alimentos siempre debes introducirlos en la neverita a temperatura ambiente o fríos de la nevera.
Mantener una buena higiene
Pero además de conservar bien los alimentos, también es fundamental que nos lavemos muy bien las manos antes de empezar a manipular los alimentos. Para ello podemos enjuagarnos las manos con agua de una botella o bien utilizar geles desinfectantes o toallitas desinfectantes que ahora todos llevamos en el bolso.
Pero además de la higiene de nuestras manos, también debemos llevar especial cuidado cuando vayas a usar utensilios para cortar los alimentos. Para evitar que las posibles bacterias de un alimento se trasladen a otro por el uso del mismo cubierto, cuchillo o tenedor, debemos limpiarlos bien antes de utilizarlo en otro (lo que se conoce como contaminación cruzada).
Seleccionar bien los alimentos
Por mucho que nos gusten una barbaridad y tengamos incluso antojo de comerlos, hay ciertos alimentos que no debemos llevar a la playa porque no podemos garantizar una correcta temperatura para ellos. Es el caso de la tradicional tortilla de patatas que nos encanta llevar a taquitos para picar o dentro de los bocadillos.
Las tortillas están riquísimas, pero puede surgir el problema de los huevos poco cuajados a altas temperaturas. Y no queremos pasar una salmonelosis en verano… así que ¡evita el huevo!
De igual forma, evita los postres lácteos, el queso fresco y cualquier otro alimento que necesite de una conservación específica en ambientes más fríos.
Si quieres llevarte un bocadillo a la playa, mejor si apuestas por los alimentos como el jamón ibérico o los embutidos ibéricos curados ya que se conservan mejor y las temperaturas les afectan menos, pudiéndose conservar perfectamente en la neverita con los bloques de hielo.
Aquí te dejamos uno de nuestros artículos anteriores con comidas de playa con jamón ibérico y bocadillos ibéricos para llevar a la playa.
Llevar la fruta sin cortar
La fruta será tu gran aliada en los días de playa, pero según los expertos, es mejor llevarla entera y cortarla allí justo en el momento de consumirla. ¿Por qué? Porque si la llevamos cortada, la fruta tiene más posibilidades de que se contamine.
Llevarse fruta a la playa es una de las mejores formas de mantenernos hidratados y saciarnos durante horas. Sandía, melón, cerezas, etc.
Si quieres llevarte comida a la playa, recuerda estos consejos fundamentales: presta especial atención a la higiene de los alimentos y a la tuya propia antes de comer; utiliza envases y neveras adecuadas; evita los alimentos que puedan ponerse malos con el calor y apuesta por los embutidos curados; bebe mucha agua y come mucha fruta. ¡Y a disfrutar!
Esperamos que este post les haya ayudado a descubrir más de este delicioso producto. Si quieren disfrutar de los mejores productos ibéricos, les animamos a visitar nuestra tienda online y en nuestras redes sociales de Facebook, Twitter e Instagram.
